SE BUSCA AUMENTAR LA PRODUCCIÓN OVINA EXPORTABLE DE MAGALLANES
Hasta la estancia Luz Aurora,
ubicada en la comuna de San Gregorio a 130 Kilómetros de Punta Arenas, del
productor ovino, Jorge Cañón, beneficiario del proyecto Innova Corfo, donde
INIA Kampenaike, participa como ente técnico colaborador, llegaron el seremi de
Agricultura, Alfonso Roux, el director regional de Corfo, Marcelo Canobra, los
profesionales de INIA a cargo del desarrollo técnico del proyecto, Raúl Lira,
Camila Sandoval y el propio director regional de la institución, Francisco
Sales; con el propósito de constatar en terreno el inicio de un ambicioso
proyecto que busca aumentar la producción ovina de Magallanes, a través de
incrementar la sobrevida de corderos de gestaciones melliceras en un 170%.
Para el director regional de Corfo, Marcelo Canobra, este es un proyecto que
tiene componentes muy interesantes y un impacto productivo para el sector ovino
de la Región. “En general las mayores mortalidades de ovejas se producen
después de la parición, por lo que tenemos claro que es en este período que hay
que cuidarlas de manera más intensiva y es a través de este proyecto, que
esperamos que las tasas de parición aumenten de manera significativa”.
El director, agregó que es un proyecto apoyado a través de la línea de innova
región de Corfo y que permite la adquisición de bienes de capital, financiar
costos de operación y contratación de profesionales. “Es un instrumento que
cumple con la tarea de facilitar la incorporación de nuevas tecnologías a un
sector, que, si bien es tradicional, en los últimos años está incorporando
procesos y nuevas formas de trabajar para aumentar la productividad en
concordancia con las líneas del Ministerio de Agricultura”.
Un estudio realizado por la Seremi de Agricultura e INIA Kampenaike sobre
“Transferencia técnica para mejorar la productividad ovina en Magallanes”,
indica que para Magallanes, se estima una mortalidad postnatal de un 20% para
corderos de parto simple y hasta 50% de partos múltiples. Es decir, cada año
mueren entre 300.000 y 500.000 corderos, lo cual se traduce en un bajo
porcentaje de destete (76% de promedio regional) y una baja tasa de extracción,
manifestó el Seremi de Agricultura, Alfonso Roux.
“De ahí la pertinencia de esta iniciativa. De esta forma se evaluará si bajo
techo se mejoran los índices de sobrevivencia lo que permitirá mostrar cómo
abordar y con qué inversión es posible dar solución al problema para aumentar
la productividad y competitividad del sector”, dijo la autoridad.
La producción ovina de Magallanes está en niveles productivos muy por debajo de
su potencial. De hecho, en la estancia Luz Aurora se ha logrado destetar en
manejo a campo extensivo valores de entre 92 y 145% de corderos de ovejas
diagnosticadas de preñez doble, lo que es muy errático en el tiempo, por lo
que, con el manejo propuesto por INIA, se proyecta obtener valores de 170 -
175%, con mayor estabilidad productiva, de corderos al destete.
En términos más simples explicó Raúl Lira, lo que queremos lograr con este
proyecto es que “por cada 100 ovejas melliceras, el potencial de parición es de
200 corderos y de éstos, con la intervención y el manejo intensivo, se espera
llegar a la etapa del destete con, 170 corderos”, especificó el investigador de
INIA Kampenaike a cargo del proyecto.
Si bien la empresa postulante hasta el momento, aplica parte de las técnicas
propuestas por los profesionales de INIA Kampenaike, aún falta evaluar la
intervención y manejo intensivo de los partos de vientres de gestación múltiple
para empaquetar y difundir el conjunto de medidas y así aumentar la producción
de carne ovina exportable de Magallanes.
En este contexto, lo primero que se hará es clasificar y separar las ovejas
preñadas melliceras, para, en una primera etapa, mejorar y suplementar su
alimentación. Esto se logra, ecografiando a las hembras del rebaño, tarea que
está a cargo del Dr. médico veterinario, Francisco Sales; mientras que el
monitoreo de las pariciones será responsabilidad de la Dra. médico veterinario,
Camila Sandoval.
Se estima que las ovejas empiecen a parir desde el 28 de septiembre, “En este
minuto estamos haciendo las ecografías, lo cual es sumamente crucial para el
proyecto que, se enfoca en salvar más corderos al parto, entonces esto nos
permite identificar a las ovejas melliceras, que son las que tienen mayor riesgo
de perder corderos al nacimiento por el síndrome de hipotermia e inanición. De
esta manera con las pariciones a galpón, podremos estar preparados para
solucionar estos problemas en los corderos, asintiéndolos a tiempo para lograr
que sobrevivan las primeras 72 horas de vida, que son las más críticas y así
lograr un verdadero impacto llegando con un porcentaje superior de cordero al
destete”, señaló Camila Sandoval.
El siguiente paso y, más complejo, es la supervisión de las pariciones de mil
ovejas, que es la cantidad que ingresará al estudio. Este trabajo consiste en
un acompañamiento de día y noche en el galpón de pariciones para ir movilizando
a las ovejas y sus corderos a medida que van pasando las etapas y se observa
que los corderos logran mamar el calostro que es imprescindible para su
nutrición.
“Las ovejas, dos o tres días antes del inicio del parto, van a estar en un
corralón cerca del galpón de pariciones, para que a medida que vayan pariendo
ingresen con sus corderos a las jaulas de ‘ahijamiento’, donde pasarán entre
doce y veinticuatro horas bajo la observación del personal que se preocupará de
que los corderos tomen el calostro. Luego serán trasladadas a un corral más
grande con cinco ovejas y sus crías, después a una segunda jaula con 10 ovejas
y los 20 veinte respectivos corderos, para luego salir a un corral grande y de
a poco volver a formar parte del rebaño”, especificó Raúl Lira.
Este proyecto contempla un tiempo de ejecución de 22 meses con un costo total
cercano a los $70 millones, de los cuales, cerca de $40 millones son
financiados por la línea Innova Región de Corfo y el resto es co-financiado por
el productor Jorge Cañón.
EC 180821